En Argentina, las notebooks cuestan un 70% más que en países vecinos como Brasil, Chile y Colombia, mientras que los celulares son un 60% más caros que en el resto de la región. Esta disparidad de precios desincentiva la inversión en tecnología, retrasando el acceso a las últimas innovaciones en aplicaciones y software.
El sector de informática y telecomunicaciones ha sido uno de los más afectados, con una caída del 60% en ventas este año. Pero, ¿qué explica esta enorme diferencia en los precios? Los expertos señalan que la fuerte carga impositiva y los aranceles que aplica el país son los principales culpables.
El ministro de Economía, Luis Caputo, ha subrayado que la reciente reducción del impuesto PAIS, del 17,5% al 7,5%, tendrá un impacto positivo en la disminución de precios y el aumento del consumo.
El Gobierno sostiene que el crecimiento económico vendrá con la reducción de impuestos, a medida que se logre el equilibrio fiscal. Sin embargo, no se esperan cambios en el arancel del 16% en el corto plazo.
Según la Cámara de Distribuidores Mayoristas de Informática, Productores y Afines (Cadmipya), las ventas de informática, que incluyen notebooks, celulares y otros productos, cayeron un 58% en los primeros seis meses de 2024 en comparación con el mismo periodo de 2023. Este sector, que representa un tercio del mercado informático del país, facturó 220 millones de dólares frente a los 525 millones del mismo periodo en 2023.